martes, 23 de febrero de 2010

Amanecer


Desperté.
Tras una noche perfecta, desperté.

Parece que no se escucha nada, nada salvo el despertador.
Pero no es asi, el desperdor que ha interrumpido esta magnifica hora de descanso calla.
Calla y no por obra mía.

En ese instante escucho otro sonido.
El murmullo de tu respiración.
Y entonces te sentí.


Sentí ese aliento que me aturde chocar contra mi espalda.
Sentí el calor de tu cuerpo contra mi espalda.
Sentí el calor de tus brazos rodeando mi cuerpo.
Esos brazos que me rodean protegiendome del exterior.

Paz.

Paz es todo lo que siento.
Paz y tranquilidad porque tú estas ahí. A mi lado.
Amanecer y estar a tu lado es Paz.

Deseo volver a dormirme.
Volver a dormirme para tener que volver a despertarme a tu lado.

Despertarme a tu lado es despertarme en mi mundo feliz.
Un mundo feliz donde tu eres mi Planeta y yo soy el satélite que gira a tu lado.
Un satélite que conviertes en planeta, donde tu eres mi planeta-satélite girando a mi alrededor.
Dos Masas de tierra girando en una trayectoria imposible, girando el uno sobre el otro.

Te quiero, ha sido un finde inolvidable a tu lado.
Gracias por dejarme orbitar en tu atmósfera.
Te quiero.

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