miércoles, 20 de abril de 2011

Luna Llena

Levanto la vista de los apuntes porque me acaba de llegar un mensaje al móvil. Dejo los apuntes a un lado, estoy tumbado en la cama, son las 21:00 y ya es de noche. Alargo la mano y recojo el móvil con la esperanza de que el sms que me ha llegado sea tuyo.

Adivina mi cara al ver esos 9 dígitos que ya me se de memoria, esa sonrisa no tiene precio. Desbloqueo el teclado y abro el mensaje con mi corazón latiendo de ansiedad.

Un sms precioso, en el que nombras la Luna, esa luna llena que ilumina la oscuridad. Es precioso que te acuerdes de mi cuando veas la luna, que tus pensamientos sean para mi cuando necesites expresar la belleza de la luna en la oscuridad. Se me ilumina el rostro al pensar que por muy separados que estemos cuando mire al cielo y vea esa preciosa luna; tu a muchos kilómetros de distancia estarás mirándola también y pensando en mi tanto como yo pienso en ti.

En estas noches alejado de ti lo que más ansío es sentir tus brazos rodeándome. Y tus labios por detrás susurrándome que todo va a pasar, que vamos a estar juntos todas las noches, que nuestros caminos se unen en uno solo y que todo lo que necesitas lo tienes entre tus brazos.

Necesito oír que todo va bien y que nada va a poder con nosotros, que tu eres el pilar que sostiene mi vida y que ese pilar va a resistir a todo, terremotos, inundaciones, incendios...

Quiero rozar tus dulces labios, sentirme vivo y que ese contacto electrizante recorra mi cuerpo una vez más. 

Miro la luna y no puedo evitar pensar en ti, no puedo evitar suspirar por ti. 

Abrázame, cobíjame entre tus brazos y hazme vivir